Apareciste como una ráfaga y te vas
silencioso, sin explicaciones. Te odio porque antes te quise. Pero eso es otra
historia, antes era tan joven, tan bella, sentada en un sillón mullido de
flores.
Ahora esas flores están marchitas. No, no me conoces, reflejas
soledad, pero nunca supiste lo que pensaba. Sólo te has fijado en el exterior.
Te quedas con el envoltorio, con sólo mi silueta, con la forma. Pero yo soy más
que eso. A mí me gusta más el regalo que lleva dentro. No sólo el papel de
colores con lindos lazos que lo envuelve. Un día fuiste mi amigo, pero hoy se
fue el encanto.
Eres tan impenetrable y superficial... Tan sólo eres una
pequeña luz en la oscuridad. No puedo aguantar tu silencio por más tiempo. Antes
te daba tanta importancia...Pero a ver ¿quién eres tu? o mejor aún : ¿ Quién te
crees que eres? Eres sólo uno más, con diferente marco. Todo es relativo, todo
depende de la luz con la que mires. Pero te domé. Sí que lo hice. Tú en el
fondo, no me conoces de nada, como para atreverte a insultarme. Tú que no tienes
ni personalidad propia, que te dejas llevar por la primera que se te acerca, con
la primera que ves pasar. Te veo, me ves, me dejo llevar y ya ni me
quejo.
Te dí entrada a mi casa, en mi hogar, con mi familia, te puse en
el mejor sitio. Ya sólo me acuerdo de ti como referencia, sólo por necesidad. Ya
no brillas con luz propia. Eres todo lo opuesto a mí. Te veo tan...vacío.
Siempre diciendo lo mismo.
Ya no te haré caso. Ya no me fijaré más en ti
cuando te mire, ya me salí de ti, no me reflejas para nada. Sólo te veo como lo
que eres, un simple y maldito espejo.